Los seguros son herramientas de protección que cubre los riesgos, al transferirlos a una empresa aseguradora. Y esta se encargará de indemnizar los daños que pudieran ocasionar los siniestros ocasionados. En este caso no lo exige la ley. Así que si se pregunta ¿Es obligatorio contratar un seguro de hogar? La respuesta es no, pero si muy conveniente.

Lo más importante es que estas garantías son posible suscribirlas considerando las necesidades reales de las personas. Sin embargo, si hay seguros que la ley obliga a contratarlos, en especial los de responsabilidad civil en todos los ámbitos. Y el hecho de no suscribirlos acarrea penalizaciones que se encuentran contempladas en la legislación.

Mientras que el seguro de hogar no es obligatorio, sin embargo, la vivienda es uno de los bienes más preciados de la familia. Razón de peso para protegerla y resguardarla contra posibles daños ocasionados por eventos de cualquier naturaleza.

De hecho, en España alrededor de 3 de cada 4 hogares cuentan con seguro. Y en algunas comunidades o zonas del país casi todos los hogares están asegurados, como el País Vasco. Pues las personas están conscientes de los beneficios que representa contar con un seguro de hogar.

Ser propietario de una vivienda y mantenerla protegida es la garantía de mantenerla en buen estado por mucho tiempo. Podrá con los beneficios del seguro, vivir tranquilo y con menos preocupaciones. Ya que sabe que ante cualquier evento inesperado estará protegido en el aspecto económico para responder ante los daños que se originen.

Así que ante eventos naturales o de cualquier otro tipo tiene la alternativa de cubrir el costo de reparaciones ante los daños que se originen. Tales como inundaciones, robo, derrumbes o cualquier desperfecto, entre otros tipos de daños.

¿Cuándo es obligatorio el seguro de hogar?

Solo es obligatorio, según contratar un seguro de hogar, según lo indica el Real Decreto 716/2009 en su artículo 10. Donde se obliga a contratar un seguro de hogar al adquirir un préstamo hipotecario. Este seguro debe incluir la cobertura básica para cubrir daños ocasionados por un posible incendio.

La cobertura contra incendio, por lo general, está incluida dentro de las coberturas del seguro de hogar. Pero, la realidad es que el seguro de hogar no es obligatorio, pero el seguro contra incendio sí, para las viviendas hipotecadas. De esta manera se protegerá la propiedad contra este tipo de contingencias.

Cabe destacar, que es un seguro que el contratante tiene la alternativa de convenir con la compañía aseguradora de su elección. No es obligante, desde 2013, contratarla con la misma entidad bancaria con la que se contrae la hipoteca.

En el mismo sentido, cuando se alquila una vivienda tampoco es obligatorio que el inquilino contrate un seguro de hogar. Sin embargo, es muy conveniente hacerlo, pues asegurar el contenido o una parte de él, le garantiza, en especial si tiene niños pequeños, que podrá reparar o renovar el daño ocasionado y entregar la vivienda en perfecto estado, sin que le genere grandes gastos.

En este contexto, muchos propietarios que alquilan una vivienda, incluyen una cláusula en el contrato que obliga al inquilino a contratar un seguro de hogar. Sin embargo, la ley no lo obliga en ninguno de sus artículos. No obstante, es conveniente contratarlo, para protección del inquilino y del propietario de la vivienda.

En definitiva, así como el seguro de hogar hay muchos otros que tampoco son obligatorios. Sin embargo, es muy conveniente conocer cuáles seguros son obligatorios contratar. De esta forma no tendrá ningún tipo de problema legal ni de otra índole. De hecho, en España hay alrededor de 800 tipos de seguros que son obligatorios y gran cantidad de personas no saben cuáles son.

Y la realidad es que, sin la contratación de los seguros obligatorios, no es posible que se realice la actividad relacionada con la cobertura. Y de no contratarlo y se realiza la actividad, las personas corren riesgos de sufrir daños y recibir sanciones de orden económico, por considerarla una infracción administrativa muy grave.